Alarma de Muñeca Sure


La Alarma Sure es un dispositivo especialmente diseñado para corredores, que se pone en la muñeca y que en caso de intento de robo o agresión, tras ser activado, enciende una potente alarma acústica con destellos. Está pensada para las jornadas de entreno nocturno cuando por las calles ya no queda nadie y da un poco de cague salir a correr. Cuesta 15 € en Amazon UK.

Alarma para Corredores
Alarma para Corredores

9 comentarios en “Alarma de Muñeca Sure

  1. Hola, yo tenia costumbre de ir a hacer 15km cada dia campo a traves cerca de una carcel, y entre eso y las masias que cada una tenia su perro ya tenia un censo aproximado de una buena familia de «posibles», lo peor es verlos babeando cerquita de la rodilla con las babitas cayendoseles y enseñando su «humilde»dentadura (doberman), han sacado una película de terror psicologico con ese nombre que trata del tema, muy recomendable.
    Animalicos.

  2. Mala suerte lo del amigo y la rodilla :/
    Muchas veces he tenido que bajar el ritmo al pasar junto a un perro, que luego te persiguen si te ven corriendo, y otras más he tenido que aumentar el ritmo al verme en una persecución D:

  3. Os falta mencionar ese clásico: «no, tranquilo, que no hace nada» cuando lo tienes ladrando y corriendo alrededor, o cuando se te está subiendo encima y babeando. Yo, además, tengo un problema de fobia a los perros, así que al parque, a según qué horas, ni me acerco y al paseo del canal (zona especial para correr en Zaragoza) tampoco. Lo de siempre, es un asunto de educación y poco más

  4. Hola. Yo no he tenido nunca problema alguno -quitando algún excremento que me he llevado a casa pegado en las suelas- directamente con los canes: ni me han perseguido; ni me han ladrado; nada de nada, de verdad. Curiosamente, la única vez que me ha pasado algo relacionado tuvo que ver más con la estupidez del dueño que con el pobre animal, que se asustó incluso más que yo. Y es que el tipo llevaba al perro cogido con una de esas correas extensibles que no se ven en la oscuridad de finas que son, y el modorro, ojo al dato, se encontraba a un lado del camino mirando el móvil y el perro al otro. Imagínate dónde quedaba la cuerda. Pues, mira, me vio venir el tipo y ni se inmutó, con dos coj****. Me enredé en la cuerda pero no me caí y, al ponerle cara de «Hombre, por favor», me suelta: «No vayas corriendo». P’a mear y no echar gota.
    Este compañero ha tenido la mala suerte de que al caer sobre una rodilla una piedra pequeña de estas con aristas se le ha incrustado en la rótula haciendo cuña. Uno en un millón. También es mala suerte.
    Por cierto, juancito, a partir de ahora te pediré que supervises mis mensajes antes de enviarlos, ¿te parece, majo? Ya sé que en el blog se hacen comentarios sobre los gadgets que nos presenta Sampietro. No te preocupes que a partir de hoy lo tendré en cuenta.

  5. qué sería sin los perros de esos habituales cambios de ritmo jeje , Yo también estoy un poco harto del tema perros, y no encuentro una solución a ellos cuando menos te lo esperas estes o no en ciudad te encuentras el perro suelto y el dueño diciendote que no hace nada , mientras te persigue y tu no sabes si mirar para el perro , el suelo o los posibles obstaculos

  6. ¿Y para los puñeteros perros?¿No hay nada? Porque os juro que me dan ganas de salir a correr con una recortada. Un compañero se ha fracturado una rotula al caer de rodillas al suelo por un puto perro suelto que se le cruzó en el parque. Estaba corriendo además por un camino que rodea el parque habilitado expresamente parra correr. El dueño llamó a perro con un silbido y se escaqueó el muy cobarde.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.